Se realiza una evaluación e intervención de niños, niñas y adolescentes con emociones, pensamientos y conductas que interfieren en diferentes áreas de su vida: personal, familiar, escolar y social.
Para los niños es muy complicado identificar lo que les ocurre y pedir ayuda.
Cuando están pasando por una mala época, suelen presentar conductas de retraimiento, enfados frecuentes y sin motivo aparente y explosiones agresivas. Su estado de ánimo y su forma de actuar cambia.
Consideramos que la etapa de 0 a 6 años es muy importante para asentar unos buenos cimientos emocionales y más allá, centrarnos en proporcionales las herramientas necesarias para que puedan caminar por la vida con autonomía y seguridad en sí mismos y en que pase lo que pase allí estaremos nosotros, para acompañarles y darles la mano si así lo necesitan. En ocasiones, ocurre que los niños son muy pequeños y abordamos la problemática con los progenitores en consulta, las pautas sobre crianza respetuosa y disciplina positiva suelen ayudaros a encaminar determinadas dinámicas familiares problemáticas que empezaron siendo pocas y se fueron convirtiendo en rutina.
¿Qué abordamos más frecuentemente en la terapia infantojuvenil?
- Alteración del estado de ánimo
- Alteraciones de la conducta
- Maltrato, abusos
- Problemas emocionales derivados de: duelo, adopción, divorcio, separación…
- Problemas de relaciones sociales y baja autoestima
- Problemas de control de esfínteres
- Problemas de sueño
- Rabietas
- Crianza
- Dificultades para gestionar emociones (frustación, ira…)
- Miedos y fobias
- Acoso escolar
- Identidad de género